La tumba en sí misma es interesante, presenta una planta acodada, es decir,
con un giro de 90 grados.
Fijaros también cómo la disposición de las distintas partes de la tumba corresponde
muy aproximadamente al esquema que you ofrecimos para distinguir
lo que es las características de una tumba real del Valle de los Reyes.
En el caso de la tumba de Tutmosis III, se ha podido observar cómo,
por ejemplo, la jamba derecha de la puerta C, o el acceso C,
es decir, el acceso que hay entre el corredor B y la sala C,
fue eliminada por los propios egipcios, de manera que con ese
espacio se pudiera introducir dentro de la tumba algún objeto de gran tamaño.
Lo mismo sucedió con la escalera que comunica el corredor B con el corredor D.
Esa escalera sufrió daños de la misma manera que el
dintel que da al corredor D,
el acceso al corredor D, en este caso el dintel también fue eliminado.
Es evidente por lo tanto que a esta tumba
entró algún objeto de gran tamaño, que no se
realizó teniendo en cuenta las dimensiones que se le había dado a la tumba.
Después también, por ejemplo, se ha podido comprobar que el final de corredor D,
es decir, el paso a la sala del pozo o sala E,
estuvo originalmente cerrado mediante una puerta de madera.
Tengamos en cuenta que puertas de este tipo no se van a ver en el Valle de
los Reyes por lo menos hasta principios de la dinastía XIX, con Ramsés II.
Otra puerta de estas características se halla justo en el acceso a la
cámara sepulcral.
Tengamos también en cuenta que en ese acceso a la cámara sepulcral, la escalera
que va desde la sala F hasta la sala J,
o cámara sepulcral, fue en su mitad inferior prácticamente alisada, de modo
que esos escalones de la mitad inferior después se tuvieron que reconstruir.
Es decir, evidentemente un objeto de gran tamaño,
pensemos en el sarcófago o cualquier otra pieza voluminosa,
tuvo que abrirse paso por una tumba que you había sido excavada.
Fijémonos ahora en otro dato de interés.
La tumba de Tutmosis III es la primera tumba real
en disponer de un pozo en la sala E.
Si nos fijamos, ni KV 38 tiene pozo ni KV 20 tiene pozo.
Tampoco KV 42, aunque esta no se diseñó aparentemente para un rey,
sino para Hatshepsut-Merytra.
También otro dato de interés es la altura media del corredor,
estamos hablando de 1,96 metros, mientras que la anchura supera los 2 metros.
Es decir, estamos you en ese paulatino crecimiento de la tumba del que
you comentamos características generales en otro vídeo.
En la cámara sepulcral hallamos como decoración el Libro del
Imiduat y la Letanía de Ra en los pilares.
Mientras que en la sala F lo que domina es una decoración
también con cielo estrellado, igual que en la cámara sepulcral, con un friso kheker,
pero con un listado de más de 740 dioses del Imiduat.
Es justo lo que tenemos en esta fotografía.
Fijaros que aquí el cielo está estrellado, tenemos un friso kheker,
esa enorme lista de dioses del Imiduat, pero dos pilares que están sin decorar.
Aunque, si os fijaís, veréis cómo sí que están cuadriculados, es decir,
preparados con esa plantilla para después poder plasmar aquí alguna decoración.
Este es un detalle de esa lista de dioses del Imiduat.