Cuando decidimos aventurarnos a desarrollar un programa especializado para la plataforma Coursera tuvimos una serie de discusiones bastante fructíferas sobre el tipo de programa que imaginábamos. Había aspectos en los que todos los miembros del equipo estuvimos de acuerdo desde un inicio. Por ejemplo, el de imaginar un programa panorámico sobre tecnología musical que fuera, al mismo tiempo, interesante para alguien que no tuviera conocimientos previos, y que aprovechara estos cursos como una primera introducción a la música y a la tecnología pero que, al mismo tiempo, fuera interesante para alguien que ya tuviera alguna experiencia y quisiera ampliar su panorama o, en todo caso, encontrar un espacio para desarrollar su creatividad. Otro aspecto en el que coincidimos fue la idea de utilizar herramientas tecnológicas que, por una parte, fomentaran la colaboración y, por otro lado, fueran accesibles para cualquier persona que mínimamente contara con una computadora. Es por eso que decidimos utilizar exclusivamente software libre que fuera multiplataforma, o sea, que corriera bien en Windows, Mac y Linux. También, es por eso que decidimos fomentar, promover el uso de licencias permisivas, como las Creative Commons, que favorecen la libre circulación de la cultura. Además, todos estuvimos de acuerdo en que era buena idea dividir nuestro programa en distintas etapas. Concretamente, quisimos dedicar una primera etapa para hablar de temas relacionados con la producción musical y la ingeniería de audio, para sólo después sumergirnos en el mundo de la programación musical, viendo lenguajes como Pure Data, SuperCollider o Arduino. Y, en una tercera etapa, como vimos en el curso "seis", nos dedicamos a reflexionar sobre las implicaciones que el software libre y la cultura libre tienen para la producción cultural. Ahora que concluyeron los seis cursos anteriores, son testigos del resultado que todas esas discusiones tuvieron al final. Ya conocen los contenidos que fuimos desglosando en cada una de las etapas y ya saben, también, cuál es la manera particular que cada uno de nosotros tiene de abordar la producción musical y la creación en términos generales. Sin embargo, considerando que ya pasaron varios meses desde que comenzaron con esta travesía, les propongo que hagamos un repaso por los contenidos más relevantes, esos que no deben olvidar por ningún motivo de los muchos que vimos en su momento. En el curso "uno", Diego nos habló de la producción musical entendiéndola como una práctica creativa y no sólo como un asunto meramente técnico. Hablamos, entonces, de las distintas etapas de la producción e hicimos una revisión panorámica de la historia de este oficio. Para abordar los aspectos prácticos del curso, Diego presentó el programa Ardour, una estación de audio digital bastante completa en la que podemos producir nuestros proyectos musicales haciendo uso de distintas herramientas y sin necesidad de pagar grandes cantidades. Aunque se abrió la posibilidad de que quienes así lo quisieran usaran otros programas similares, era importante para nosotros comprobar que el universo del software libre nos ofrece alternativas eficientes para producir música. En el segundo módulo de su curso, Diego presentó una introducción a la teoría del sonido y a la grabación y edición de audio digital. Entre otras cosas, aprendimos entonces a configurar una sesión en Ardour y, con ello, nos enfrentamos a distintos conceptos que cualquier productor musical necesita tener en cuenta. La frecuencia de muestreo y el tamaño del "buffer" son algunos ejemplos de ello. Si no recuerdan con precisión el significado de estos términos, les sugiero repasar los videos del curso "uno". Otro tema fundamental que se trató en este curso, es el de la teoría general del sonido y la relación que ésta tiene con el funcionamiento de dispositivos de audio, como son los micrófonos y las interfaces. Después de revisar los aspectos generales del audio digital, Diego introdujo las funciones del protocolo MIDI y aprovechó para revisar algunos aspectos de la teoría musical que es necesario conocer para generar casi cualquier tipo de música, al menos en lo que toca al repertorio occidental. Vimos cómo construir una escala musical, cómo hacer secuencias armónicas y cómo generar patrones rítmicos sencillos para aplicar todos esos elementos a la creación de secuencias MIDI. Por último, el cuarto módulo del curso estuvo dedicado a dar algunas recomendaciones para estructurar las piezas o canciones que realizaron y se dieron, también, algunos "tips" para mezclar y exportar sus sesiones de audio. En el curso "dos" se retoman todos los aspectos de producción musical que se vieron en el primero, pero ahora se profundiza en el tema de la grabación y la postproducción utilizando estaciones digitales. El objetivo de Nicolás fue dotar de herramientas para producir música con los elementos que encontramos en un estudio de grabación pero, también, con los que podemos conseguir cuando queremos hacer música con nuestros propios medios. En un primer momento, Nico nos habló de la relación entre el arreglo y la producción y, poco a poco, fue adentrándose en distintos tópicos que todo productor necesita manejar, desde el conocimiento de los distintos tipos de micrófono hasta cuestiones relacionadas con el flujo de señal y con las técnicas de grabación estéreo. Vimos, incluso, cómo grabar una batería y cómo armar una sesión de grabación en Ardour. En el tercer módulo de este curso, nos adentramos de lleno en el tema de la mezcla y vimos procesos de ecualización y compresión, fundamentales para cualquier trabajo de producción. También hablamos del tratamiento acústico y, en general, de lo que implica mezclar diferentes pistas de audio. Así, llegamos al cuarto módulo en el que seguimos revisando procesos esenciales de audio, en este caso, el "delay" y la reverberación. Esto nos condujo a hablar de la etapa de masterización o finalización de un producto musical, con lo cual estuvimos listos para sacar del horno nuestra primera pieza producida de principio a fin. Los cursos de Diego y de Nicolás se complementaron entre sí para brindar un panorama del arte de la producción musical y sirvieron, además, para demostrar que el software libre es una opción viable para adentrarnos en estas tareas. El curso "tres", en cambio, tuvo como objetivo introducirnos en el mundo del audio digital a un nivel más profundo de lo que hicimos previamente, además de que sirvió como una primera aproximación a la programación informática aplicada a tareas musicales. En este caso, Hernani y yo decidimos utilizar el lenguaje gráfico Pure Data con el que aprendimos a construir nuestros propios instrumentos virtuales. En el primer módulo de este curso revisamos la sintaxis general de Pure Data, dimos la diferencia entre objetos de audio y objetos de control e hicimos un primer sistema de audio basado en un oscilador de ondas senoidales. En el segundo, retomamos el tema de la teoría de sonido para, a partir de ello, estudiar los fundamentos de la síntesis digital. Construimos sintetizadores capaces de generar ondas simples, cuadradas, triangulares y dientes de sierra combinándolas con procesos de síntesis aditiva, sustractiva y de modulación de amplitud y frecuencia. Después, Hernani nos explicó de qué manera utilizar Pure Data para reproducir y manipular archivos de audio. Aprendimos a invertir, acelerar y retardar la reproducción de estos archivos, así como a programar procesadores de tiempo como el "delay" y la reverberación. Finalmente, en el cuarto módulo revisamos algunas herramientas para optimizar la interfaz gráfica de nuestros instrumentos y trabajar de manera ordenada. Además, vimos cómo implementar MIDI en Pure Data e, incluso, Hernani nos explicó de qué manera utilizar otro tipo de protocolos para conectar nuestros instrumentos a otros programas. Ya que aprendimos a programar en un entorno gráfico como Pure Data, quisimos dar un paso más en el camino de la tecnología musical. Es así que, en el cuarto curso, Cristian y Mauro nos invitaron a experimentar la composición algorítmica utilizando el lenguaje SuperCollider en el que nos enfrentamos a la programación musical a partir de la escritura de líneas de código. En la primera semana de este curso se abordó la sintaxis general de SuperCollider y aprendimos a realizar tareas sencillas, como crear sintetizadores por medio de "UGens" y reproducir archivos de audio. En la segunda semana, dimos un salto significativo en términos de complejidad al aprender a definir instrumentos de síntesis por medio de SynthDefs y a generar rutinas, patrones y secuencias. En el tercer módulo, nos dedicamos a estudiar algunas herramientas de síntesis avanzada que nos permitieran, por ejemplo, generar sintetizadores multicanal o programar envolventes de timbre. En este módulo vimos, también, algunas técnicas de composición algorítmica que se inspiran en la música serial. En esta misma semana logramos construir una pieza polifónica a partir de programación algorítmica. Para cerrar este curso, el cuarto módulo nos sirvió para adentrarnos en el tema de las gramáticas y los llamados sistemas "L", así como para aprender a convertir en sonido el contenido de bases de datos. A la par de los temas mencionados, vimos en este curso varios videos en los que Mauro nos compartió una pequeña probadita de lo que SuperCollider es capaz de hacer cuando sumamos la creatividad y el desarrollo tecnológico. Desde sistemas genéticos hasta autómatas celulares, hasta composiciones pensadas para difundirse a través de redes como Twitter, son infinitas las posibilidades que este tipo de lenguajes ofrecen. Después de revisar distintos tipos de software llegó nuestro momento para traer el tema del desarrollo tecnológico a nivel de hardware. Es con esta finalidad que, en el curso "cinco" Cristian y Mauro desarrollaron un plan de trabajo que, de manera simple y amena, nos permitiera construir instrumentos físicos utilizando la placa de Arduino. Para ello, en un primer momento fue necesario estudiar cuestiones básicas de electrónica y conseguir los componentes necesarios para empezar a conectar capacitores, LEDs y resistencias. Posteriormente, nos dispusimos a instalar el programa y a introducir el lenguaje que se requiere para operar nuestro Arduino. Vimos, también, cómo configurar nuestros puertos seriales y cómo diseñar sistemas electrónicos utilizando el Protoboard. Aprendimos, también, a trabajar con sensores y a configurar las salidas de Arduino. Todo esto nos sirvió para construir nuestros primeros aparatos capaces de generar sonido. La actividad medular de este quinto curso estuvo concentrada en su tercer módulo, y consistió en el desarrollo de un controlador MIDI, el cual conectamos a un "patch" de Pure Data para crear un secuenciador que se manipula a través de botones y perillas. Para realizar la actividad de este módulo, fue necesario combinar varios de los conocimientos que se estudiaron en los módulos y cursos anteriores. En cambio, en la cuarta semana de este curso decidimos dejar abierta la actividad para que ustedes desarrollaran cualquier tipo de instrumento. Este último ejercicio buscaba privilegiar la creatividad y la imaginación por encima de las habilidades técnicas. Sin embargo, varios de ustedes aprovecharon la ocasión para ponerse a investigar por su cuenta y crear proyectos que aplican Arduino de manera realmente interesante. Así llegamos al curso "seis" en el que optamos por poner un paréntesis al desarrollo tecnológico y el aprendizaje de herramientas técnicas para, en cambio, detenernos a reflexionar sobre los efectos que el software libre, el código abierto y las prácticas colaborativas tienen en la música y el arte. Empezamos por discutir las diferencias y similitudes entre los movimientos de software libre y código abierto y, más adelante, analizamos el impacto que éstos tienen en la cultura y en la música. En un segundo módulo abordamos las consecuencias que el Internet y las redes digitales han tenido para la producción cultural, poniendo énfasis en el tema de la distribución artística. Esto nos llevó a discutir el asunto de los derechos de autor y a proponer que las licencias permisivas, particularmente las licencias Creative Commons, son una gran alternativa para aprovechar los beneficios que las redes nos ofrecen para efecto de la libre circulación cultural. Todo esto nos condujo a hablar de la música colaborativa como una opción viable para producir arte. Vimos entonces distintas perspectivas estéticas que se caracterizan por fomentar la colaboración y la libre circulación de la cultura. A partir de revisar prácticas como el "live coding", la música "remix" y la música en red, pudimos constatar que son muchas y muy variadas las aproximaciones que los artistas están teniendo en la actualidad hacia los temas tratados en el curso. Para terminar nuestro recorrido, en el cuarto módulo del curso "seis" nos dedicamos a explorar algunas herramientas que pueden ser de gran utilidad al momento de producir música libre. Vimos diversos repositorios, servicios de publicación y comunidades en línea que coinciden en fomentar los principios de cooperación y libre acceso, que son el eje vertebral de este programa especializado. Hemos pasado por muchos lugares, hemos abordado varios temas y aprendido a manejar distintas herramientas. Lo único que nos falta para concluir este viaje es reunir todos esos elementos en un único proyecto integrador, y de eso se tratará, justamente, la actividad de este séptimo curso. En el siguiente vídeo les explicaré con más detalle en qué consiste esta actividad y cuáles serán los criterios para evaluarla.